En este artículo revisamos en que consiste la normativa de registro salarial obligatorio y valoramos su utilidad. Sigue leyendo para conocer más datos acerca de la brecha salarial y la Ley de igualdad retributiva y así descubrir por qué resulta útil la normativa de registro salarial obligatorio.
¿Qué es la brecha salarial?
La brecha salarial es como se conoce a la diferencia que existe entre el salario medio de las mujeres y el de los hombres. Es decir, la brecha salarial hace referencia a la brecha existente entre el salario medio de una mujer y el de un hombre, a lo que gana de menos una mujer en comparación con lo que gana un hombre de media.
La brecha salarial existe, por tanto, cuando el valor del trabajo de un hombre y de una mujer es el mismo pero su sueldo no, teniendo en cuenta que el derecho fundamental a la igualdad de remuneración por género es un derecho reconocido desde 1919 por la Organización Internacional del Trabajo.
Consecuencias de la brecha salarial
Ahora bien, las implicaciones negativas que esta brecha salarial puede suponer para la vida de las mujeres son amplias. En primer lugar, la consecuencia básica de la brecha salarial es que las mujeres disponen de un menor poder adquisitivo derivado del trabajo a tiempo parcial, los salarios menores e igualdad de horas trabajadas con una pensión más pequeña.
Esta discriminación supone para muchas mujeres el tener que depender de su familia o de sus parejas durante mucho tiempo y puede llegar a condicionar completamente sus vidas al no permitirles desarrollarse como seres autónomos e independientes.
Del mismo modo, la brecha salarial también se traduce en muchos casos en que la mujer queda relegada a las tareas del hogar, y cada vez más, en que debe dedicarse tanto a trabajar fuera por una remuneración más pequeña que la que perciben los hombres como también a realizar las tareas del hogar, cuidar de los niños y encargarse de los ancianos o de las personas dependientes a cargo de la familia, sin recibir remuneración alguna por ello.
¿Cuál es la brecha salarial en España?
En los últimos años, mientras el salario anual más frecuente entre las mujeres rondaba los 15.500 euros anuales, el de los hombres sobrepasaba esta cifra en gran medida, con unos 18.500 euros de media al año. De esta manera, el salario medio de las mujeres es tan sólo un 83,8 por ciento del salario masculino. Teniendo en cuenta la edad de las personas trabajadoras, cabe reseñar que la brecha salarial se incrementa desde los 4,6 para los trabajadores de entre 25 a 34 años hasta 18,2 para los trabajadores de entre 55 y 64 años.
De hecho, datos más concretos evidencian que la diferencia entre el salario medio de los hombres y de las mujeres en España es todavía más grande. Según diversos estudios la diferencia entre el salario anual medio de hombres y mujeres es de 4915 euros al año en perjuicio de las mujeres. Para que se comprenda, las mujeres tendrían que cobrar casi un 29 por ciento más de media para poder igualar el suelo medio de los hombres.
Además, los expertos evidencian que, si bien la brecha salarial se acorta, momentos como la crisis del 2008 o la actual del Coronavirus no hacen más que agrandar esta brecha, y que, en la actualidad, según los datos recopilados, harían falta 105 años para vencer de una vez por todas la brecha laboral. Sin duda es por este motivo que se torna fundamental la aplicación de diferentes leyes y normativas como la que presentaremos más adelante para controlar este problema y conseguir acortar la brecha.
Ley de igualdad retributiva: ¿qué es?
De esta forma, para hacer frente al gran problema que supone la brecha salarial para la sociedad se ha elaborado la Ley de igualdad retributiva. Esta Ley tiene como principal objetivo que ninguna persona pueda cobrar menos que otra en el mismo trabajo por razón de su sexo. Del mismo modo, esta Ley establece la necesidad de realizar un registro salarial obligatorio para poder valorar mejor este problema y combatir de esta manera la brecha salarial.
Con esta ley las empresas deben incluir en las nóminas de los empleados la información del salario medio distribuido por género para poder controlar y visualizar sin problemas y de forma gráfica si alguna organización establece salarios muy desiguales para los hombres y para las mujeres
Del mismo modo, con esta Ley las empresas tendrán que justificar también la retribución de cada uno de los puestos de trabajo, incluyendo el salario base, los complementos salariales y todo tipo de retribuciones presentes en las nóminas para reducir de manera significativa la arbitrariedad con la que la mayoría de las organizaciones premian a algunos trabajadores y dejan de lado a otros.
Si la diferencia entre los salarios de los hombres y las mujeres en una empresa supera el veinte por ciento se considerará que estamos hablando de una situación de discriminación y se obligará a la empresa a justificar y explicar la diferencia ante una inspección para después corregir inmediatamente sus políticas a nivel retributivo.
Del mismo modo, para conseguir alcanzar el objetivo de la ley y terminar con la brecha salarial en España, también se están potenciando las inspecciones con poder sancionador. Del mismo modo, esta ley incluye también aspectos como las bajas en el trabajo por el cuidado de los hijos, maternidad, etc., que a la reincorporación de la mujer se traducen en un descenso de su remuneración y que esta nueva normativa quiere atajar de raíz.